¿CÓMO GESTIONAR EL DNSH EN LOS PLANES DE SOSTENIBILIDAD TURÍSTICA EN DESTINO?
- Clasifica las actuaciones del plan siguiendo el cuestionario de Autoevaluación y el Reglamento de Taxonomía.
La guía DNSH facilita un cuestionario de autoevaluación que nos hace clasificar las actuaciones como elegibles de bajo impacto ambiental y elegibles de no bajo impacto ambiental. Estas segundas son las que requieren de demostrar acciones para conseguir paliar los efectos. Es indispensable introducir el principio DNSH en los procesos e identificar estas acciones para evitar futuros problemas en la justificación.
- Asegura cumplir con la normativa incluyendo los objetivos medioambientales específicos para cada una de las actuaciones de tu plan. Tienes que tenerlos antes de iniciar los procesos de contratación.
Las guías técnicas de la Comisión Europea y los actos delegados del Reglamento de axonomía recogen los requerimientos a incluir para paliar estos efectos. Estos requerimientos son solicitados por ley y nos los piden como responsables del plan a las instituciones. Los destinos tienen que tener sus actuaciones con garantía de bajo impacto ambiental o con los compromisos de acciones reglamentarias para paliarlos antes de iniciar ningún proceso de contratación.
- Llévalo a los pliegos de licitación.
Los licitadores tienen que comprometerse a cumplir los objetivos marcados por los reglamentos europeos, y para ello todo tiene que estar recogido en los pliegos técnicos y administrativos de las contrataciones. Además, se tiene que producir un proceso de control del cumplimiento que facilite y garantice una justificación positiva tras la entrega de obra con todos los requerimientos cumplidos.
